Red ACLO Potosí.-
En el municipio de Vitichi el pasado mes de marzo se realizó un encuentro nacional sobre el agua, en el cual diversas organizaciones sociales e indígenas expresaron su preocupación por este recurso vital. En muchas partes del país, el agua ya no está disponible para el consumo humano y mucho menos para la producción. En algunos casos, los ríos están siendo fuertemente contaminados por la actividad minera.
“Actualmente, hay muchos casos donde no hay agua suficiente para el consumo humano, y mucho menos para la producción. Pero en otros casos, el agua que existe en los ríos está siendo fuertemente contaminada por la actividad minera (…)”, afirmó Juan Carlos Alarcón, de la Plataforma Boliviana frente al cambio climático.
También expresó que Bolivia es el tercer país a nivel global en deforestar, con un promedio de 4.000 hectáreas por año, si esto continúa, afectará el ciclo de las lluvias o la humedad de los suelos, no sólo en la amazonía, sino también en los andes, aclarando que existe un conocimiento bastante claro de la gente acerca de dónde vienen las lluvias; de los bosques, la transpiración de la amazonía y también de los ríos y los lagos.
“Tenemos que cuidar el agua, pero no el agua que llega a tu pileta, sino de dónde viene, sobre todo las fuentes de agua y áreas de recarga hídrica; entonces, se ha planteado proponer al gobierno que declare el inicio de un plan de recuperación de las fuentes de agua”, recalcó Alarcón.
Este plan consiste en que durante 10 años todas las políticas municipales, departamentales y nacionales se concentren en preservar y conservar las fuentes de agua, áreas de recarga hídrica que se están destruyendo, lo cual es muy difícil de volverlos a recuperar. Finalmente, expresó la necesidad de crear y actualizar un marco normativo que tiene más de 100 años de vigencia, partiendo del reconocimiento del agua como un sujeto de derechos y además sagrado.
La promulgación de la Ley del Agua de 1906 en Bolivia marcó un hito crucial al establecer un marco jurídico sólido para la gestión y regulación de los recursos hídricos en el país. Esta legislación confirió al Estado la autoridad y responsabilidad sobre las aguas, reconociéndolas como un bien público esencial. Además, la ley estableció directrices claras para el uso, aprovechamiento y distribución equitativa del agua, así como medidas para salvaguardar las fuentes y cuencas hidrográficas. Este marco normativo sentó las bases de una administración integral de los recursos hídricos en Bolivia y ha evolucionado a lo largo del tiempo mediante modificaciones y actualizaciones para abordar los desafíos actuales en la gestión del agua.
La minería constantemente amenaza a las frágiles fuentes de agua y contribuye en gran medida a la contaminación. Estas son diariamente contaminadas por el vertimiento de tres tipos de influentes: drenaje ácido de minas, colas de ingenios clandestinos y desagües municipales.
CR/Radio ACLO Potosí