La jornada de ayer martes, militantes del MAS afines a Evo Morales y al presidente Luis Arce, protagonizaron enfrentamientos en la localidad de Vila Vila (Carretera Oruro-La Paz), en el marco de la marcha convocada por Morales denominada “marcha para salvar Bolivia”, donde se registraron al menos 26 heridos.
Ambas organizaciones coincidieron en afirmar que se trata de un conflicto interno en el que cada cual está utilizando a las organizaciones con fines netamente pre electorales, “el fondo realmente es que uno busca mantenerse en el poder y el otro quiere retomar el poder a través de este tipo de acciones a través de la violencia”, lamentó el presidente de la asamblea peramente de derechos humanos de Chuquisaca, Freddy Jiménez, quien pidió no involucrar a la población en estos movimientos y menos someterlos a escenarios de violencia “hay bastante presión, amenaza, chantaje y sanciones contra los campesinos, obreros y funcionarios públicos que acuden a este tipo de convocatorias de manera obligada y no de manera voluntaria”, precisó.
El ejecutivo del magisterio rural, Rodrigo Echalar si bien es pesimista en que la solución del conflicto sea encaminada por ambos protagonistas, considera que quien realmente puede lograr la pacificación y evitar la confrontación son las bases, “estamos viendo con mucha preocupación este enfrentamiento entre trabajadores, campesinos…sectores populares que en vez de confrontarse entre ellos deberían estar unidos para enfrentar la crisis económica para defender los derechos de los trabajadores y del pueblo en general, pero lamentablemente están siendo utilizados”, enfatizó el Echalar a tiempo de acusar a los dirigentes de arrastrar a sus bases a sabiendas de que tienen mucho que perder en este conflicto y mucho por beneficiar a políticos que una vez hayan logrado sus objetivos los dejarán en el olvido.
Desde la semana anterior organizaciones sociales del MAS, afines a Evo Morales anunciaron una serie de movilizaciones, marchas y bloqueos para esta semana dicen que para exigir respuestas a la escasez de dólares, diésel y la crisis económica; en tanto que afines al presidente Luis Arce respondieron a los anuncios manifestando que defenderán la democracia. Desde el gobierno acusaron a Morales de gestar un Golpe de estado para lograr que el presidente del senado Andrónico Rodríguez (afín a Evo Morales), suceda en el cargo al presidente y al vicepresidente ante una posible salida de los mandatarios por los conflictos.