Gran Chaco, abril de 2025 .- En pleno siglo XXI, alrededor del 80% de las comunidades indígenas del Pueblo Guaraní del Itika Guasu, en la provincia O’Connor del departamento de Tarija, no cuentan con acceso a agua potable. Así lo denunció René Arebayo, dirigente de la Asamblea del Pueblo Guaraní del Itika Guasu (APG-IG), quien lamentó la falta de respuesta efectiva por parte de autoridades locales y nacionales, pese a que el acceso al agua es un derecho consagrado en la Constitución Política del Estado. Las familias indígenas se ven obligadas a recurrir a fuentes improvisadas y colectivas, muchas veces sin saber si el agua es apta para el consumo humano.
Arebayo advirtió sobre los graves riesgos sanitarios que enfrenta la población, citando casos de enfermedades e incluso fallecimientos presuntamente vinculados al consumo de agua contaminada del río Pilcomayo, que según estudios recientes presenta altos niveles de contaminación. “Estamos consumiendo agua sin tratamiento, sin análisis, con el riesgo permanente de enfermarnos. Ya hemos tenido familiares que han muerto con malestares estomacales o incluso cáncer, y los estudios apuntan a la calidad del agua”, expresó el dirigente, visiblemente consternado.
Asimismo, el líder guaraní exigió la reparación urgente de los sistemas de agua por cañería destruidos por el aluvión de febrero de 2022, desastre que afectó a más de 500 familias. A pesar de los compromisos asumidos por autoridades del Estado, aún no se ha dado solución a las comunidades damnificadas como Tomatirenda, Ñaurenda, Filadelfia, Saldito de Ñaurenda, Moko Mokal, Abra la Chispa, Ytayuro y Timboy. “Han pasado más de tres años desde el aluvión, y seguimos sin agua. Nos hemos cansado de enviar notas y pedir atención, pero las autoridades están más enfocadas en los temas políticos y sus intereses personales que en las verdaderas necesidades de nuestros pueblos”, concluyó.
Redacción Prensa ACLO Chaco.