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Desastre en Llallagua: la mazamorra que arrasó Andavilque tenía desechos mineros a cargo de Comibol, según la Alcaldía

La entidad estatal aún no se pronunció sobre el tema. La diputada Toribia Lero exige una investigación y se pide declarar desastre departamental.

“¡¡Es el peor desastre ambiental en Bolivia!! Exigimos al Gobierno realice una investigación sobre lo ocurrido en la comunidad de Andavilque, en el municipio de Llallagua, del departamento de Potosí, comunarios señalan que no fue mazamorra, fue desastre ambiental, porque colapsó un dique de cola de pasivos mineros, la misma era conocía como la laguna del Kenko, alguien tiene que resarcir a las víctimas por todo el desastre causado, demasiada irresponsabilidad no puede quedar en la impunidad”, denunció la diputada Toribia Lero, por medio de una publicación en sus redes sociales.

Sobre la mazamorra que, a las 05.00 del domingo, arrasó con el 70% de las casas de Andavilque, el alcalde de Llallagua, Adalid Aguilar, confirmó que el lodo estaba formado por los desechos mineros acumulados desde la época del empresario minero Simón I. Patiño y que el mantenimiento de los diques de cola que colapsaron estaba a cargo la Corporación Minera de Bolivia (Comibol).

Esto incrementaría el nivel del desastre, ya que se teme que se hayan propagado contaminantes que afecten la tierra y el agua de la zona.

“Quienes conocen el distrito minero de Catavi, que está ubicado a cuatro kilómetros de la ciudad de Llallagua, existe una laguna el Kenko, que anteriormente se generó por el trabajo (minero) en tiempos de Patiño, evidentemente todo ese predio no está bajo administración de la Alcaldía, sino bajo la administración de Comibol”, aseguró Aguilar en entrevista con Red Uno.

El burgomaestre reveló que dirigentes mineros informaron que la Comibol contrataba a gente del lugar para realizar los trabajos de mantenimiento en los diques de cola donde se encontraban estos residuos. Las acciones de control se realizaban, principalmente, en la época de lluvias.

No obstante, en 2024 y este año no se cumplió con los trabajos de mantenimiento, según la información que se dio al Gobierno Municipal de Llallagua.

Aguilar señaló que, la gran cantidad de precipitación de lluvia, en ambas gestiones socavaron la base de la laguna y se provocó una filtración que tomó fuerza en el camino empinado y arrasó con Andavilque, una comunidad dedicada a la agricultura y a la crianza de camélidos.

Hasta el momento no hay un reporte oficial con la cantidad de casas afectadas, área de cultivos destruidos, animales muertos y personas heridas y desaparecidas. No obstante, hasta esta mañana se mencionó que 45 familias habitaban el sector, que el número de casas cubiertas por el lodo de residuos mineros llega a 40, unas 500 llamas y ovejas ya habrían perecido y recientes reportes confirmaron el hallazgo de una persona fallecida.

“Después de este hecho, como Gobierno Municipal vamos a convocar la presencia de los representantes de la Comibol, para analizar y hacer una evaluación de cuál fue la causa de esta mazamorra”, explicó Aguilar. Asimismo, adelantó que realizaron gestiones para estudiar otro tipo de soluciones, con la participación de personal técnico de la Gobernación de Potosí, el Ministerio de Medio Ambiente y el de Minería.

Proyecto de ley

Por otro lado, la asambleísta departamental, Azucena Fuertes, remitió hoy, una carta solicitando a la presidenta de la Asamblea Legislativa Departamental de Potosí, Ximena Paillo, se emita una ley para declarar la “emergencia departamental”. El pedido debería ser tratado en la sesión instalada esta mañana.

“Por lo tanto la suscrita asambleísta considera imperativamente urgente la declaratoria de Emergencia Departamental en Potosí. Para tal efecto adjunto a la presente una propuesta de ley, que solicito sea considerada en la sesión de hoy por el pleno de la Asamblea Legislativa Departamental”, indica el texto de la carta.

En su carta a la directiva, Fuertes detalló que, basada en reporte de la propia Gobernación, ya suma 34 los municipios potosinos afectados por las inundaciones y la lluvia, además de 800 comunidades con 23.000 familias que perdieron 1.000 cabezas de ganado, aproximadamente.

Asimismo, se conoce que, en Potosí, las emergencias también dañaron 70 viviendas, 24 tramos carreteros, tres unidades educativas y dos personas desaparecidas por las riadas.

//Visión 360

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